Lo único bueno es que pude demostrarte cuánto yo te amo.

Era lo que quería, pero sufro mucho.

Como pasa cuando me voy, me voy con mucha culpa de que quizá estoy haciendo algo mal. 

 El mes de abril llegó de nuevo, pero no pensé que me encontraría en este lugar unos días antes.

No sé por donde comenzar.

Hace un par de meses que me invade un tipo de ansiedad, ansiedad al cambio. Hoy es un día en el que tuve un "aha moment" de que la única cosa que puedo hacer para lograr entenderme es estar aquí.

Ya he hablado de lo mucho que me gustaba entrar en metamorfosis, de lo mucho que me gustaban los cambios y de lo poco que me gustaba permanecer. En los últimos años esta postura se puso al revés. Parezco un tauro. Pero, ¿qué le hago? 

Soy yo. Sigo siendo yo. La misma mujer torpe que hace 10 años abrió este blog. No, no soy la misma. Todavía no sé si me gustan mis cambios, pero los acepto.

Estoy diciendo adiós y eso no me gusta. ¿Cómo hacen ustedes para decir adiós tan facilmente? Yo me muevo de emociones y, aunque creo que es lo mejor,  me cueeeeesta. ¿Qué voy a hacer? Quiero llorar y ni siquera es el ahora, donde todo sucede. No marques las horas.

Es como si pensara que estoy dejando atrás los mejores momentos de mi vida y que no van a volver. ¿Por qué me cuesta tanto crecer? A veces para estas cosas me cuesta cargar el sol que cargo. Le quiero echar la culpa a ello. Y sí, mi libertad.

"Hoy me levanté, en otro lugar. Siento la ansiedad, la necesidad de contar quien soy. Para no morir, para no olvidar, que la vida es un pequeño soplo de LIBERTAD". Hoy seré canción...

También te estoy diciendo adiós a ti. Maldita sea y creo que es algo que todavía me pesa. Se acabó. Yo siempre voy a estar aquí para cuando emerjas del mar. Y ojala mis videntes tengan razón. Pero no quiero ser tan vieja cuando eso suceda.

Además, siento que me estoy brincando la etapa que más añoraba de mi vida. Pero, no se dio como lo quería. Es como si me conformara con lo que hay.

Pero, sé que todo lo nuevo, siempre es para mejor.

Abrázame y dime que todo va a estar bien. Que no soy indefensa. Que lo puedo. Que no estoy sola. Abrázame y dime que está bien. Abrázame y dime que puedo contar contigo.

Dioses! Esto es una locura y la puedo ver. ¿Por qué?

Es que sí necesitaba hacer este cierre para vivir tranquila y saber, que estoy tomando la decisión correcta.

Te veo más tarde, en la otra dimensión. Dime que me odias, que me dejas ir. Pero dime.

Hasta siempre, tú, yo, mi vieja yo.

Los días como hoy siempre recitó el mismo poema al despertar: 

Cómo Siempre

Aunque hoy cumplas
trescientos treinta y seis meses
la matusalénica edad no se te nota cuando
en el instante en que vencen los crueles
entrás a averiguar la alegría del mundo
y mucho menos todavía se te nota
cuando volás gaviotamente sobre las fobias
o desarbolás los nudosos rencores

Buena edad para cambiar estatutos y horóscopos

para que tu manantial mane amor sin miseria

para que te enfrentes al espejo que exige

y pienses que estás linda

y estés linda

Casi no vale la pena desearte júbilos y lealtades

ya que te van a rodear como ángeles o veleros.

Es obvio y comprensible

que las manzanas y los jazmines

y los cuidadores de autos y los ciclistas

y las hijas de los villeros

y los cachorros extraviados

y los bichitos de san antonio

y las cajas de fósforo

te consideren una de los suyos.

Acordate de esta ley de tu vida

si hace algún tiempo fuiste desgraciada

eso también ayuda a que hoy se afirme

tu bienaventuranza.

De todos modos para vos no es novedad

que el mundo y yo te queremos de veras

pero yo siempre un poquito más que el mundo.

Esperando que seas feliz. 

Han pasado dos años desde la última vez aquí. Cuatro, desde el último drama, digo trauma, que dejé escrito por todas partes. La verdad es que muchas, muchas veces, todavía pienso en él. A veces hasta sueño con él.
Antes, me revolcaba en mi misma, preguntándome por qué todavía seguía arrastrando ese fantasma. Ahora ya no me importa, ya no le presto mucha atención cuando pasa. Pero cuando pasa, si siento alguito en mi corazón. Me gustaría mucho que respondiera mis saludos. Me gustaría mucho saber que él está bien. No sé que pasa dentro de mi.
¡Ya!
Me estaba dando un ataque de ansiedad.

Lo extraño mucho.

Sé que estoy con alguien, y no podría estar con alguien mejor, pero lo otro es diferente. Lo que siento es distinto. Es como si me extrañara a mi misma.

Esta es la cara de alguien que ya casi sale de la depresión que le dejó una terrible relación amorosa a distancia y un "abandono" materno.

Me gusta cuando me veo el cabello largo. Recuerdo aquella ocasión en la que él, por video llamada me chuleaba. Decía que quería pasar sus manos a través de mi cabello y otras cosas más románticas.
Quizá eso me hizo falta. Contacto. Y entregar todos los besos que me quedaron guardados.

No he escrito mucho este año. No sé por qué. Y vaya que las cosas han cambiado. Y vaya que lo he necesitado, pero no lo hice. Nunca quise hacerlo.

Para no perder la costumbre de empezar todo con astrología práctica, todo empezó en Septiembre de 2015, cuando Saturno entró en Sagitario. Osea, cuando saturno empezó su danza sobre mi. En ese mes comenzé la étapa más forever de mi vida. Ay si, puedo viajar sola. Ay si, puedo vivir de lo que amo, porque soy una estrella. Ay si, pinches trabajos formales importan una mierda. Ay si, quiero hacerlo mientras sea joven. Pal carajo esa decisión. Y saben que yo nunca me arrepiento de mis decisiones. Bueno, también en Septiembre de 2015 empecé a relacionarme más con Iken al punto de empezar a decirle de broma (les juro que fue de broma) "crush" y bueno, lo demás ha quedado más que registrado aquí. Por cierto, ahora si ya no existe más ningún tipo de relación entre él y yo.

Pero iré a lo importante. 

El 25 de diciembre de 2015 fue un día bastante ummm malo (?) para mi. Nunca había sentido lo que sentí cuando desperté esa mañana de Navidad. Desperté llorando y dando gemidos de dolor porque había tenido un sueño muy malo que me desgarró el alma.Es más, me despertó mi propio llanto. Nunca me había despertado así y el hecho de que eso pasara, me hizo darme cuenta de la gravedad de mi situación emocional. Estaba lidiando con la ruptura con él. Y sí, ya sé que fue una mamada, pero me afectó mucho. Hasta la fecha no creo que vuelva a coincidir con alguien así y eso fue lo que me lastimó, perderlo sabiendo que no iba a volverlo a encontrar. ¿Qué soñé? Carajo, no sé si fue premonición o qué, pero soñé que mi mamá me dejaba por elegir al wey con el que salía en ese entonces, era otro.  No pude levantarme de la cama en TODO EL PUTO DÍA, ni siquiera porque era Navidad. Recuero que solo pensaba en la escena de Lilo & Stitch cuando ella, tirada en el suelo y escuchando Heartbreak Hotel le dice a su hermana "Leave alone to die". Así me sentía, como Lilo, y sí, solo quería morir. No es drama, lo digo en serio. No le tomé importancia porque pensé que era una muestra de como estaba mi inconsciente y ¿saben qué? Pasó. Mi mamá nos dejó a todos por su nuevo novio. No sé ni como voy a hacerle para salir de este vacío. No lo sé. Solo quiero estar bien. Despertarme un día y estar bien. No como ahora que siempre estoy llorando por todas las cosas que ya me pasaron este año. No puedo seguir así. No quiero. Ya no quiero seguir...pero no sé como hacerle. Ya me perdí.     

No he venido porque no he querido, pero creo que lo necesito.
He dejado pasar varias cosas que amo, inconscientemente y saben por qué? Estoy tratando de enfocarme. Estoy tratando e volver a ser responsable, de ser adulta.
Esto me está creando un conflicto emocional fuertísimo.
Ya no bailo con frecuencia y hasta he pensado en dejar de bailar. Esto último me asusta mucho, mi real ser jamás en la vida pensaría en eso. También es la razón de que yo retomara mi amistad con Iken. A pesar de todo, él es una persona única para mi. Cuando quiero pensar en alguien que me entienda, que sepa lo que pasa adentro mio hasta cuando yo misma no me entiendo, es él. YO nunca lo odié entonces no puedo evitar sentirlo como parte importante de mi vida y en verdad necesitaba palabras suyas en estos momentos tan confusos (que nunca me faltan). Al menos algo bueno ha salido de esto.

Ahora estoy con alguien especial, no es como yo, no es nada como yo, pero creo que ahí está el reto. Es una buena persona, aunque a veces dudo en nosotros.  Dudo mucho y no soy la única responsable de eso. A veces estoy feliz, a veces me cuestiono. A veces me pregunto qué estamos haciendo y si eso es correcto, si me hace bien o a la larga es otra cosa que solo acabará destruyendome. Es diferente, me digo, y lo estoy intentando. Aunque me disgusta usar esa palabra para describir mi relación con él. Así es, me costó encontrar a esa persona, me costo chingos, ustedes lo saben y no voy a renunciar tan fácilmente a ello. No voy a renunciar a nada en mi vida como antes. No voy a renunciar a las cosas cuando se ponen difíciles. En fin.

No es lo mejor que he escrito, pero espero pronto volver :)