2019

Han pasado dos años desde la última vez aquí. Cuatro, desde el último drama, digo trauma, que dejé escrito por todas partes. La verdad es que muchas, muchas veces, todavía pienso en él. A veces hasta sueño con él.
Antes, me revolcaba en mi misma, preguntándome por qué todavía seguía arrastrando ese fantasma. Ahora ya no me importa, ya no le presto mucha atención cuando pasa. Pero cuando pasa, si siento alguito en mi corazón. Me gustaría mucho que respondiera mis saludos. Me gustaría mucho saber que él está bien. No sé que pasa dentro de mi.
¡Ya!
Me estaba dando un ataque de ansiedad.

Lo extraño mucho.

Sé que estoy con alguien, y no podría estar con alguien mejor, pero lo otro es diferente. Lo que siento es distinto. Es como si me extrañara a mi misma.


Esta es la cara de alguien que ya casi sale de la depresión que le dejó una terrible relación amorosa a distancia y un "abandono" materno.

Me gusta cuando me veo el cabello largo. Recuerdo aquella ocasión en la que él, por video llamada me chuleaba. Decía que quería pasar sus manos a través de mi cabello y otras cosas más románticas.
Quizá eso me hizo falta. Contacto. Y entregar todos los besos que me quedaron guardados.